Me encanta dejar pasar a mi novia delante al entrar en un lugar con gente, para ir viendo como todos los hombres le miran descaradamente el culo.
Luego alcanzarla, agarrarselo y decirselo al oido. Sus caras no tienen precio
Me encanta dejar pasar a mi novia delante al entrar en un lugar con gente, para ir viendo como todos los hombres le miran descaradamente el culo.
Luego alcanzarla, agarrarselo y decirselo al oido. Sus caras no tienen precio
Hola lector! Chevismo cerró ‐ como habrás observado ya. Rescaté el diario porque siempre le tuve mucho cariño. En el proceso de rescatarlo me enamoré un poco otra vez de él...
En algún momento añadiré de nuevo la capacidad de escribir nuevas entradas y comentarios. Gracias por pasarte por aquí.
También quiero hacer una especie de "libro" con las entradas más emotivas y algunos comentarios. Poco a poco!