— Lunes, 19 de marzo de 2012 a las 6:41

No supiste entenderme jamás, ni si quiera tuviste el valor de intentarlo. Nunca me escuchaste, solo tenías oídos para ti mismo, en ningún momento percibiste mis lágrimas ni mi dolor ni mis gritos. Puede que me merezca eso por tu parte pero no lo quiero, así que me voy. Me voy bien lejos, a donde me espera alguien que me da lo que tú no me dabas. Lo que en apenas en un mes se te agotó. En un mes, joder, un puto mes, y eso que jurabas y perjurabas que jamás se iría. Adiós, pecoso, adiós.
Ni si quiera te mereces esta despedida, ni si quiera…

Hola lector! Chevismo cerró ‐ como habrás observado ya. Rescaté el diario porque siempre le tuve mucho cariño. En el proceso de rescatarlo me enamoré un poco otra vez de él...

En algún momento añadiré de nuevo la capacidad de escribir nuevas entradas y comentarios. Gracias por pasarte por aquí.

También quiero hacer una especie de "libro" con las entradas más emotivas y algunos comentarios. Poco a poco!