En ese momento, aleatoriamente elegido por alguna parte de mi cerebro, en ese momento de tantos momentos, una realidad abrumadora, que se había ido construyendo en mi, por fin terminó su construcción. Me había dado cuenta de que nunca haré algo por lo que me recuerden. Nunca destacaré en nada bueno más que alguien, siempre seré del montón, tirando para abajo, hacia el fondo, y si me recuerdan por algo, no será nada fuera de lo común. Nunca habrá nadie que vaya a parecerle encantador o gracioso algo de lo que yo haga. No tendré una cualidad especial que nadie tenga, que me haga especial, nunca dejaré de ser alguien más. Es la verdad.
Casi nadie hará algo por lo que le recuerden, lo importante esque la gente que te recuerde bien por tal y como eres va a ser la que te quiere y esa es la gente que debes de querer que te recuerde, yo como muchos otros también soy del montón tirando para abajo, pero según la gente tengo cualidades buenas que me hacen de querer, tú también debes de tener las tuyas, aunque solo sea por ser tú seguro que muchas personas ya te quieren, lo que no se puede esperar es hacer lo mismo que la gente normal y que se nos recuerde como a Einstein.
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Anónimo —
Sábado, 21 de abril de 2012 a las 11:42
Al menos una cualidad la tienes seguro, has hecho que Anonimus te deje un comentario muy agradable ;)
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Anónimo —
Domingo, 22 de abril de 2012 a las 21:44
@Chevi después de esto fui al baño a vomitar arco iris
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Anónimo —
Lunes, 23 de abril de 2012 a las 16:40
Hola lector! Chevismo cerró ‐ como habrás observado ya.
Rescaté el diario porque siempre le tuve mucho cariño. En el proceso de rescatarlo me enamoré un poco otra vez de él...
En algún momento añadiré de nuevo la capacidad de escribir nuevas entradas y comentarios. Gracias por pasarte por aquí.
También quiero hacer una especie de "libro" con las entradas más emotivas y algunos comentarios. Poco a poco!