No culpes a los demás de lo tuyo. Es obvio que podrás volver a amar, quizá no ahora, pero en algún momento sí. No te autocompadezcas, sal del vórtice de autodestrucción en el que tú mismo te empeñas en quedarte.
Y por si acaso…¡QUESO!
A esa chica que nunca lee mis entradas:
No lees mi blog y mucho menos este diario totalmente anónimo. Quiero que sepas que heriste mi orgullo. Sí, me hiciste la peor herida que se le puede hacer a alguien.
¿Te quiero? Mucho, infinitamente, mi ego me lo dice sorprendiéndome a mi mismo latiendo aceleradamente cuando me hablan de ti…
¿Te odio por lo que hiciste? Mucho, infinitamente… y es por eso que no puedo amarte, no me lo consiento, no me lo podría perdonar…
Estarás contenta… has creado a un monstruo henchido de orgullo que ya no es capaz de amar…
No culpes a los demás de lo tuyo. Es obvio que podrás volver a amar, quizá no ahora, pero en algún momento sí. No te autocompadezcas, sal del vórtice de autodestrucción en el que tú mismo te empeñas en quedarte.
Y por si acaso…¡QUESO!
No, seria no veo que te pusieras. Más bien realista. xDDD
También veo que si no eres psicóloga profesionalmente, al menos eres buena psicóloga amateur de ti misma.
Y tú, tío anónimo. @Alegna lleva razón. Si no queso… ¡CHOCOLATE!
Veo una contradicción en lo que dices. Si de verdad quieres a alguien, no lo necesitarías. Necesitar a alguien no es quererlo como lo que es, sino aferrarlo para utilizarlo en beneficio propio. Sí. Por muy bien que funcione una relación (sea de pareja o de amistad), por muy bien que se encuentre cada uno, por muy poco utilizados que se sientan el uno del otro, la realidad no deja de ser esa. Se utilizan el uno al otro para cubrir los vacíos de autoestima que tienen. Y eso no es amor, es apego por necesidad. No me parece una conducta sana si se percibe la realidad de forma distorsionada. Y no me parece que mi perspectiva a la hora de interpretar la realidad sea errónea. Yo diría que poco cómoda hasta que no le coges el gusto al asiento.
Parezco idealista, lo sé. xD
Bueno, lo soy, pero flexible aunque eso sí que no lo parezca. xDDD
Yo quiero a muchas personas, a cada una de forma distinta porque cada una es un mundo y una combinación única de características, de rasgos distintos que pueden estar en más o menos sincronía con los míos. Pero no por eso siento que necesito a ninguna de esas personas. Reconozco que he sentido necesitar a algunas de esas personas que quiero, pero más tarde vi esa necesidad como si estuviera respondiendo a la típica pregunta “¿A quién quieres más, a mamá o a papá?”. Las personas a las que aprecio no se merecen que las compare o que las clasifique teniendo un criterio tal que “a esta persona la quiero más y a esta otra la quiero menos”. Eso no es criterio, eso es pensar como un niño chico. O como la mayoría de gente por considerar válido a priori el aprendizaje vicario.
Resumen: cuesta muchísimo quererse de forma sincera a uno mismo, cosa que yo hago. Eso no quiere decir que quiera poquito a los que quiero. Al contrario, quiero mucho a todas las personas que he conocido y que son importantes para mí, sobre todo las que me muestran reciprocidad, cosa que no espero ni necesito, pero es algo que agradezco y disfruto. Me siento muy afortunado.
No veo contradicción alguna.Cuando quieres a alguien y estás con esa persona, tu cerebro segrega unas sustancias que crean adicción y solo esa persona te las das, por eso echas de menos a las personas y demás.
Tampoco observo que por necesitar a alguien te quieras menos a ti mismo siempre y cuando si tienes que irte de su lado, eres capaz de hacerlo. Ya te dije que nadie es imprescindible.
¿Qué vacío de autoestima es ese? ¿El dejar llevarse por procesos biológicos incontrolables es no tener autoestima? Venga ya.
Una cosa es que no quieras a alguien y le necesites, y otra distinta que le quieras y necesites. Yo quiero a mi madre muchísimo y la necesito, y no por ello tengo una baja autoestima.
Te sorprenderá pero yo tampoco creo en el “¿a quién quieres más?”, también pienso que cada persona es independiente y lo que siento por ellas igual.
No ves contradicción porque tu premisa parece corroborarlo, pero no es tanto así. En primer lugar, no compartimos el mismo concepto de necesidad. Y en segundo, tu premisa basada en nuestra biología no es lo suficientemente consistente.
El cerebro es plástico, podemos moldearlo como plastilina y eso se hace siendo capaces de arrancar de raíz semillas que se plantaron un día en nuestra mente y germinaron para convertirse en árboles y arbustos. Son lo que nos definen, son lo que nos hace ser como somos. Y por eso, al no compartir el concepto de necesidad, tampoco compartimos el concepto “echar de menos”.
Tú piensas que la reacción biológica que alguien tiene al querer a una persona no es controlable y necesariamente ese alguien va a necesitar la existencia, la conexión física y la respuesta o reciprocidad porque de alguna forma se vuelve adicto a esa persona. Pero esto no es algo que esté escrito en nuestros genes. Está en nuestros pensamientos (creencias). Yo no es que controle esa reacción tan humana, yo decidí tener otra motivación y me parece que por ello me quiero más. He pasado de necesitar a las personas que quiero a solo necesitar acceder a mis recuerdos sobre esas personas. Y recordando a esas personas soy capaz de sentirme igual que si estuvieran aquí a mi lado viviendo conmigo, porque las ideas que se han plasmado en mi cerebro que consiguen que yo segregue esas sustancias no son las mismas que puedas tener tú u otra persona. Yo no creía en esto, pensaba que todo esto era cuento chino, pero no es así. He sido capaz de comprenderlo y es un motivo por el que me quiero más, porque valoro muchísimo más mi capacidad para revivir y recordar a las personas que quiero, sintiendo que por mucho o poco tiempo que haya vivido y tratado con ellas, ya viven en mí, han dejado una huella imborrable a menos que sufra de Alzheimer en un futuro, que ojalá y no.
Dejarse llevar por procesos biológicos no es no tener autoestima, es conocerse menos a uno mismo, ergo un riesgo.
¿Pedantorro? ¿Hola? xDDD
Perdona, pero que no te apetezca esforzarte en comprenderme en estos momentos no hace de mí un pedantorro. No soy lo que tú ni nadie digáis. Soy lo que diga yo porque llevaré más razón sobre mí que nadie. Punto. xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
Naaada nada, @Lelvi, al contrario, se agradece que nos brindes con oportunidades como esta para que nos expresemos y debatamos… De eso se trata, ¿no? Compartir y crecer, olé. xD
Denso sí, pero para nada pedantorro. No veo que esto sea una clase de filosofía tampoco, ¿a ti te lo parece? A mí no. Chico sincretismo hay aquí para decir que esto sea filosofía, jajaja… xD
No soy pedante. No hago como si me creyera mejor por ser como soy ni por expresarme como me expreso. Si te parece que sí, algún prejuicio raro tienes sobre mi densidad pensando que va de la mano de creerse mejor que a quien le hablo. Y para nada es así.
Una cosa no es cómo yo creo que soy. Una cosa es como yo SÉ que soy y otra como me interpretan los demás. Si coinciden, los demás llevarán razón. Si no, me pararé a pensarlo. Pero ya te digo, no suele llevar razón nadie que no me interpreta de forma que coincida con la imagen que tengo de mí.
Espero que te mejores pronto, por mí puedes leerlo cuando quieras. Como si no lo lees, fíjate. No escribo para que solo tú me leas, nuestra conversación le puede interesar a cualquier otro que pase por aquí y llevarse algo bueno de ella.
¡Un saludo!
Hola lector! Chevismo cerró ‐ como habrás observado ya. Rescaté el diario porque siempre le tuve mucho cariño. En el proceso de rescatarlo me enamoré un poco otra vez de él...
En algún momento añadiré de nuevo la capacidad de escribir nuevas entradas y comentarios. Gracias por pasarte por aquí.
También quiero hacer una especie de "libro" con las entradas más emotivas y algunos comentarios. Poco a poco!