— Lunes, 25 de julio de 2016 a las 10:13

Me da cosa publicar así, porque no me acuerdo de la ID y no puedo loguearme. Pero al ser esto anónimo pues tanto monta. Peccavi, pater optime. Además desde el Móvil.

En fin, quería hablar del advenimiento progresivo de la mediocridad. Esto es, un aborregamiento sin precedentes que es hasta escandaloso. Leo algunas perlas que no pueden sino hacerme recordar a Millan Astray con su “Muera la inteligencia” (y dijo eso para luego cepillarse a la nieta de Ortega y Gasset y darle una hija, si eso no es poético…).

No es por hacer de pedante o elitista. Pero es que estamos arrojando al futuro intelectual de esta generación en los brazos de cuatro prosélitos de la oligofrenia. ¿Slavoj Zizek es inspirador? ¡No es serio! Es la mascota de la élite intelectual, nada más. Si le quitas la máscara, de suerte le arrancas la cara también. Y ese es el mejor de todos, de la demás chusma de gorro frigio mejor ni hablamos.

¿Qué ha pasado con la educación? Cómo vas a tomar en serio a un tío, por mucho graduado que tenga, si te dice que su principal fuente de inspiración es un tipo como Zizek, que es la viva imagen del kitsch.
Se supone que la educación universitaria tiene como objetivo formar una clase intelectual, superior. No asentarla en el Midcult, para cuyo único fin tenga escupir cuatro gargajos filosóficos de aire altivo y pretencioso.

Y esto lo critico “in pace”, donde estoy condenado a perpetuidad. Como Catón, ya retirado, vencido y degradado.

Hola lector! Chevismo cerró ‐ como habrás observado ya. Rescaté el diario porque siempre le tuve mucho cariño. En el proceso de rescatarlo me enamoré un poco otra vez de él...

En algún momento añadiré de nuevo la capacidad de escribir nuevas entradas y comentarios. Gracias por pasarte por aquí.

También quiero hacer una especie de "libro" con las entradas más emotivas y algunos comentarios. Poco a poco!